La comida deliciosa por la tarde

Disfrutamos de la atención excepcional de Fátima y su familia, quienes nos hicieron sentir como en casa. La habitación era espaciosa y muy limpia, y la ubicación era ideal, a pocos minutos de la playa.

El ruido del servicio de limpieza en el pasillo a partir de las 9 de la mañana fue un poco molesto, pero nada que arruinará la experiencia general.

Las habitaciones son amplias y acogedoras, además de que

el alojamiento se siente como un hogar. El personal es increíblemente atento y amable, destacando en su servicio. La cercanía a la playa es un gran plus, aunque el acceso al parking puede ser un poco complicado a veces.

Camas muy cómodas y trato familiar excepcional.

El trato de los dueños fue excepcional, me sentí como en casa. La habitación era amplia y muy limpia. Además, está a solo 5 minutos a pie de caños y en una zona muy tranquila. El restaurante ofreció un menú excelente y a buen precio.

Lo recomendaría.

Cómodo e acollidor, con atención brilliantada. Limpieza impecable e colchón de primeira. A ubicación ideal para ver os atardeceres, e a comida deliciosa, tanto o menú como os chocos fritos. Unha experiencia auténtica, así que, sen dúbida, repetiremos!

Pasamos 3 noches con amigos y la experiencia fue increíble. Las camas son súper cómodas y los desayunos están de lujo. Fuimos a ver la puesta de sol en la playa y a Cabo de Trafalgar, todo recomendado. El personal se portó genial y nos hizo sentir como en casa.

El acceso al parking es un poco complicado, hay que tener cuidado al entrar y salir, pero no arruina la experiencia.

comunicaciones deficientes, ducha problemática, limpieza ejemplar

Además, la cortina de la ducha no es muy efectiva, prepara toallas secas porque el agua termina salpicando todo!!! Es una pequeña molestia.

Limpio y acogedor con un servicio excepcional, preparando deliciosas comidas con amor.

un hogar lejos de casa, personal atento y desayuno delicioso

Las camas son muy cómodas, la limpieza impecable y el trato familiar te hace sentir en casa. Tuve una experiencia maravillosa en este hostal, sin duda volveré.

El Hostal Cafetería El Mero fue una elección acertada. La habitación era muy amplia, decorada con buen gusto y estaba impecablemente limpia. Disfruté del aire acondicionado, ya que las temperaturas eran altas en agosto. Además, la cama era cómoda, ideal para descansar después de un día en la playa. El servicio de desayuno fue destacado, con opciones ricas y un pan de mollete espectacular. Un detalle a mejorar son las cortinas de ducha, que no son lo suficientemente largas y el agua salpicaba un poco. También, el acceso al parking podría ser incómodo, hay que tener precaución al entrar y salir. A pesar de eso, el personal siempre fue cordial y me hicieron sentir como en casa. Sin duda, repetiría la experiencia.

el personal es muy simpático y te hacen sentir como en casa. la ducha puede salpicar.

* Camas muy cómodas
* Habitaciones limpias
* Desayuno extraordinario

* Ruido en pasillo
* Acceso al parking complicado

La atención del personal fue maravillosa! ! Siempre dispuestos a ayudar y hacernos sentir como en casa. La ubicación es perfecta, a pocos minutos de la playa y de lugares increíbles para ver atardeceres espectaculares. Desayuno delicioso, con opciones típicas y un pan exquisito.

El acceso al parking puede ser un poco complicado, pero no arruina la experiencia.

La habitación es amplia y muy limpia, con camas súper cómodas y almohadas geniales. El aire acondicionado funcionó perfecto, lo que se agradeció porque hacía calor. Pero la ducha tiene una cortina que no es muy efectiva y se te acaba salpicando el agua. En general, muy bien para descansar y estar cómodo, pero ese pequeño detalle en la ducha puede mejorarse.

Las habitaciones son amplias y muy limpias, con camas cómodas para un buen descanso. La ducha es una experiencia interesante, aunque la cortina podría ser más eficiente para evitar que el agua salga del plato.

La entrada y salida del parking exige un poco de precaución, ya que puede resultar incómoda. Además, si llegas tarde, deberás llamar a recepción para acceder a tu habitación, lo que puede ser un engorro, especialmente si no quieres estar esperando. La ubicación, aunque cercana a los caños de Meca, no ofrece un acceso directo a pie, obligándote a optar por el carril bici o la carretera, no ideal si viajas con niños.